Cuando trabajamos por Cooperativo, es habitual que nos asalten dudas sobre la confección de los equipos, el tiempo que debemos mantenerlos o sobre cómo lidiar con los problemas derivados de los distintos agrupamientos: alumnos que no quieren ir con otros, quejas de los padres...
Por eso es imprescindible que todos los participantes del proceso conozcan los criterios a la hora de establecer las distintas agrupaciones y, sobre todo, uno de los principales propósitos del AC: desarrollar habilidades interpersonales. Aprendemos a trabajar en equipo cuando nos encontramos ante el que es distinto a nosotros, pues nos "obliga" a desarrollar la empatÃa, la asertividad, la autorregulación... trabajar con los afines es sencillÃsimo, pero la vida está llena de momentos en que debemos ceder, negociar, convencer y argumentar... he aquà una de las riquezas de esta metodologÃa.
Para facilitar esta labor a los docentes que se acerquen al cooperativo o que se encuentren en plena vorágine, he creado esta infografÃa para que puedan utilizarla en el aula o incluso en las reuniones de padres.
Puede observarse de forma clara la división entre los tres tipos distintos de agrupamiento, desde el más "improvisado" y de corta duración como el Grupo Informal, hasta el más duradero y que permite un trabajo más profundo como es el caso de los Grupos de Base Cooperativos, pasando por los más utilizados y versátiles Grupos Formales.
Como docente, es importante que conozcas y domines este vocabulario y que dejes claras las directrices y razones pedagógicas de tus decisiones, si no quieres vivir al vaivén de las quejas, por lo demás, habituales y lógicas de los alumnos.